Han sido dos noches y días maravillosos, y tú, aunque a 400 km, has estado a mi lado, como siempre.
Te he echado de menos, mucho.
Te echo de menos, incluso ahora, con mucho alcohol en mis venas, e intentando acertar con las teclas. Que es díficil, mucho.
(Qué de letras y acentuaciones y espacios y la tecla de la tilde y la barra espaciadora se me resisten)
He conocido a una persona maravillosa, es la mejor amiga de ya sabes quien, sí, la he besado, pero te besaba a tí, lo sabes.
Cuando C me ha llevado de tiendecitas y salas de arte por las callejuelas de este Madrid (que cada día me parece más maravilloso)(mientras las locuelas veían el rugby) me he sentido.....ufffff... qué personas más encantadoras e interesantes! conocer a la artista australiana (todo lo que queríamos comprar vendido, qué pena!) al compositor "frustado" con el que hemos bailado y cantado en su local de discos especializados. Nos hemos agenciado unos cds mú ricos. Ya verás.
El artista de la piel, que ya, por pesados, nos ha regalado unos "monederos".
La señora de los pájaros. El niño y el padre "raro" de la bici sin pedales. Los andaluces...ainsss los andaluces... que con uno... mi querida J estará ahora... ay omá!
Encantadores!
Qué agustismo!
Qué de ricas sorpresas!
Qué jungla tan diversa!
Qué de qué de qué!!
Y hemos bailado... cómo hemos bailado.... además cómo me gusta... en un bar que no pega ná de ná pero que... hasta el camarero "pofesional" de tó la vida... super serio... y formal... (morfol) nos ha regalado más de una sonrisa...
Con lo que me gusta a mí hacer sonreír... reír...
Pero qué payasa y loca está tu Amor!!!
Como la moñono, pero en su sitio.
Ainssss.... qué bien lo pasemos!!
Te quiero. Y aunque la sonrisa de este chavalito, porque era un crío, y sus historias me han conmovido, su mirada molaba, daba miedito....
Yo, en mi sitio.
Con nuestro Amor por bandera.
Porque tú. Tú. Tú.
Uffff tú.
Que... vengas pacá YA!
Y no, ni soy hetero ni soy tríbada, no se me puede etiquetar.
Me molan mogollón las personas.
Las personas.
Qué bonito.
Qué todo.
Porque como la escena final de "Con faldas y a lo loco": Nadie es perfecto.
