miércoles, 15 de septiembre de 2010


Cuando apagaron las luces de todo el pueblo.

Oh.
Millones de estrellas que parecían se caían.
Qué techo!
Sólo por ese instante.
Todo merece la pena.
Qué bello es Vivir!



2 comentarios:

Ra dijo...

Creo que soy demasiado cursiñoña. A ver si esto lo cambio un pelín (en el blog) en mi vida diaria lo hago muy bien.

Rosario Libertad dijo...

a mi no me parece cursi... es la plenitud de instante ;)