miércoles, 13 de febrero de 2013

Un año más de experiencias



Un mes de reencuentros, discusiones gordas, peleas varias, abrazos y… declaraciones de amor.
Movidito, como todo últimamente.
Invité a una fiesta en mi cumple como todos los años (menos el pasado por el susto de mi padre) y nos lo pasamos genial. O eso me han dicho.
No tienen por qué mentir. Si son capaces de decirme cosas muy duras para el alma, que se lo hayan pasado bien o no, no es nada.
Me encanta reunir a todo/as mis amigo/as y que haya feeling (o no) entre ello/as.
Triunfaron más los bigotes que los escotes, y fue muy divertido. Originalidad siempre.
Sigo aún flipada por los pedazos de regalo, no me los esperaba.
Y desde aquí, aunque no me lean, les doy las gracias de corazón por compartir su tiempo conmigo.
Dado que es tan escaso y valioso, el compartirlo es un tesoro.

Hay personas a las que echo de menos y siempre echaré.
Otras que sé que se han quedado en el camino.
Son esas personitas que se van alejando por voluntad propia o de otro/as.
O simplemente las circunstancias actuales hacen que ya no pueda ser.
Cosa que no entiendo.
Pero que la decisión queda fuera de ti por mucho que te duela.
Y aunque no quieras decidir, te quedas fuera, está fuera de tu alcance.
No es justo.
Pero sé que el tiempo cura (siempre y cuando quieras curarte, claro).

Para mí la Amistad es lo más importante y sé que ese fueguito no se apaga.
Lo sé.
Por eso (también) seré paciente.

No hay comentarios: