lunes, 28 de septiembre de 2009

Los caramelillos están bien para los novatos, pero yo me conformo con un pastei y una Super Bock

Rumbo lusolandia.
Me espera esa caipirinha
en una de tus colinas
mirando tu río.
Tu puente infinito.
.....
Paracetamol e ibuprofeno.
Que ojalá fuese trinlingüe,
pero no,
española
con portuñol
y spanglish.
Y mucho he dicho. Que no es tanto.
Así que pastillitas blancas,
venid conmigo.
Que los sonidos,
las palabras,
el exceso de concentración,
levantan tormentas en mi neurona.
Y si mezclo la Super Bock?
Ummmmmm
A ver si aparezco en el Ángel Azul y la liamos.
.....
No me gusta dormir sola en habitaciones de hotel.
Pero claro, tampoco puedo buscar compañía.
Ejem.
Nooooooo. No.
Así que suelo devorar libros light, muy light.
Y abrazarme fuerte a la almohada.
.....
Y sí. Desayunaré pasteis de Belem.
Babas como Homer de pensarlo.....ummmmm
.....
Te echaré tanto de menos.
Cerraré fuerte los ojos hasta verte.
Sólo tengo que esperar.
.....
..........................
..........................



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Te echaré tanto de menos que las manos se me duermen. Te echaré tanto de menos que no sé cómo escapar de esta canción...
Te quiero.

P.D.: Tómate un pastelillo de esos a mi salud ;o)

Tresmasqueperros dijo...

Una musiquita de guitarra para darle a este relato aroma a fado. Un saludo, estés dónde estes...